¿Cómo fluirán los líderes en el entorno volátil y cambiante que trae la crisis? Las exigencias suben como la espuma. Los recursos disminuyen. Los empleados aprecian la flexibilidad y el reconocimiento hoy más que nunca.
Supera retos con el agile way of working
La crisis ha golpeado al mercado. Nada será lo mismo. Esto no es pretexto para que algunos aspectos no puedan optimizarse. La agilidad empresarial tiene mucho que decir y aportar en este sentido. Su aplicación constituye todo un desafío.
Las metodologías ágiles funcionaban antes de la llegada del COVID-19, la pandemia que aceleró la recesión. El valor que aportan estos métodos al operar en el mercado es un salvavidas. Si este ya era exigente, lo es más aún con respecto a las demandas del cliente, la disponibilidad, el mimo al consumidor o la entrega de un producto o servicio impoluto.
En este sentido, y como jefe de equipo, debes emprender una mejor comprensión de las necesidades y preocupaciones de tus clientes. La empatía con ellos es la columna vertebral de toda empresa en un ecosistema en constante evolución.
A la vez, empoderar a tu equipo constituye otra clave. Así, los grupos autoorganizados pueden tomar decisiones sobre el producto o servicio que están desarrollando.
Por otro lado, en la actualidad los empleados aprecian la flexibilidad. Así, tus trabajadores se sentirán valorados y reconocidos cuando les brindas la posibilidad de trabajar en remoto. También estiman que favorezcas un equilibrio entre su vida personal y profesional.
Además, recuerda la ley de Pareto: el 20 % de tus esfuerzos produce el 80 % de tus resultados. Esto genera un impacto directo en tiempo y costes. En resumen, tu objetivo al aplicar este principio responde a dos cuestiones:
- ¿En qué procesos debes focalizarte para obtener mejores resultados?
- ¿Qué ineficiencias existen para suprimirlas?
Las ventajas de las metodologías ágiles para afrontar la crisis
Son muchos los beneficios de la agilidad y más en tiempos de depresión económica. Una época en la que nos enfrentamos al recorte de gastos por parte de las empresas .
En este contexto, las metodologías ágiles han supuesto y suponen un revulsivo para equipos de trabajo de toda índole. Nacidas al abrigo de la industria del software, se han expandido a otros entornos laborales. ¿Dónde residen sus ventajas para superar y salir fortalecidos de la crisis?
Sistema de trabajo colaborativo y flexible
En este caso, tus esfuerzos se adaptan a las demandas particulares de cada proyecto durante todo su desarrollo. Por lo tanto, suponen una forma más eficiente y productiva que la organización en cascada. Esta última implica que gastes más recursos de los necesarios, algo que se agradece en momentos críticos y de recortes.
Mayor motivación y productividad de tu equipo
Somos conscientes del valor de los equipos eficientes, comprometidos y productivos. Por ello, te invitamos a que impliques a tus empleados? en los plazos y las tareas asignadas. El que conozcan el progreso del proyecto conjunto y se coordinen los alienta. ¿Qué supone esta proximidad? Una mayor implicación personal, sentido de equipo y motivación especialmente provechosa en tiempos de incertidumbre y mayor presión.
Un cliente involucrado
Una de las fortalezas diferenciales respecto a otros modelos de trabajo es la comunicación constante con el cliente. Verás que este participa en cada fase, aplica sus conocimientos y su experiencia para mejorar el desarrollo y colmar sus necesidades o expectativas.
Un consumidor que tiene la certidumbre de ser comprendido, además de compartir la responsabilidad de las decisiones determinantes. Así, tiene claro que no desperdicia tiempo ni recursos en estos momentos complejos e inseguros.
Empresas y proyectos resilientes
La resiliencia está íntimamente vinculada a la agilidad. Al desempeñar el liderazgo, tienes que saber reaccionar y moverte. No puedes quedarte paralizado, en un estado de hibernación o hacer lo de siempre.
¿Qué implica la resiliencia? La capacidad de la organización de recibir la transformación abrupta actual y de actuar movilizándose en ese cambio.
En este sentido, el comportamiento de tu empresa no tiene que ser el habitual, manido o desgastado para esta época. Tiene que marcar la diferencia y, para ello, dispone de la capacidad de superarse frente a los vaivenes del mercado.
Convierte la crisis en oportunidad
Tu empresa no es nada sin tus clientes y empleados. Ellos sirven de faro para evaluar cuál tiene que ser la oferta de valor de tu organización. Incluso pueden ayudarte a ser disruptivo y a pensar en un nuevo modelo de negocio.
En esencia, el liderazgo ágil supone la capacidad de actuar con celeridad en momentos complejos y ante cambios repentinos. Vivimos una crisis que demanda, precisamente, jefes capaces de acoplarse al cambio.
Para hacer frente a la crisis económica, echa mano a las metodologías ágiles. Si quieres ampliar información o resolver tus dudas, contacta con nosotros. Somos Agilewow4all, expertos en configurar equipos eficientes, comprometidos y productivos.
