Nos ha tocado vivir una época turbulenta, un momento de desastres climáticos, caos político y pandemia mundial. Esta era rechaza claramente la estructura, por lo que se está acelerando la transición de VUCA a BANI.
Si algo tienen en común estos conceptos es que buscan representar de manera simplificada la realidad para comprender mejor el contexto en el que vivimos. A continuación, explicaremos qué significan y cómo pueden prepararse las organizaciones para el estado de incertidumbre en el que nos encontramos.
Qué es VUCA
Es un concepto creado a finales de los años 80 del siglo pasado, cuando acababa la guerra fría y se abría un horizonte inédito sin confrontaciones. Los cambios rápidos, la inestabilidad mundial y la aparición de los avances tecnológicos eran algunas de las características que se atribuían a este escenario.
Por lo tanto, se percibía un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo (VUCA). Incierto es uncertain en inglés. Desde ese momento, este término se ha extendido a las vidas cotidianas de las personas y las empresas.
Fue con la creación y expansión de Internet cuando comenzó a utilizarse en el mundo de los negocios. El significado de las cuatro iniciales de VUCA es el siguiente:
- V = volatilidad: Entorno en el que los cambios se producen a una velocidad enorme. Se relaciona con las fluctuaciones que se producen en la demanda o la agitación que provoca cualquier noticia.
- U = incertidumbre (uncertain): Incapacidad de saber con exactitud cuáles son los cambios que se van a producir. Ambientes en los que resulta imposible realizar predicciones.
- C = complejidad: La cantidad de factores que es necesario tener en cuenta hace imposible tomar decisiones de manera eficiente.
- A = ambigüedad: Falta de claridad sobre cómo interpretar lo que está ocurriendo, ya que la información suele estar incompleta o ser contradictoria.
Qué es BANI
Este término coge mucha fuerza a raíz de la pandemia. En un momento en el que la situación global cambia tan bruscamente se requieren nuevas herramientas que nos ayuden a comprender lo que está ocurriendo.
BANI da un paso más allá que VUCA, ya que define una realidad de confusión y caos, no solo de inestabilidad e incertidumbre. El significado de sus iniciales es este:
- B = frágil (brittle): El contexto se ha vuelto muy quebradizo, los sistemas sociales y económicos no disponen de bases sólidas y pueden desmoronarse en cualquier momento.
- A = ansiedad: Es uno de los síntomas más evidentes de la sociedad de hoy en día, tanto en la vida de las personas como en los entornos laborales.
- N = no lineal: Los eventos que van ocurriendo no siguen una línea coherente; están desconectados los unos de los otros. Debido a esto, la planificación a largo plazo comienza a dejar de tener sentido.
- I = incomprensible: Incluso con bastante información disponible, se nos hace imposible comprender todo lo que ocurre a nuestro alrededor. Esto se debe a que casi nada sigue los patrones lógicos y habituales.
Las organizaciones deben adaptarse a esta nueva realidad
Con independencia de los dos términos que hemos visto, algo que es indiscutible es que las empresas necesitan adaptar sus métodos de gestión y trabajo para cada situación. Las metodologías ágiles surgen para reducir tiempo, costes y, además, ofrecer un servicio de mejor calidad a los clientes.
Estos enfoques te permiten adaptar el manual predeterminado de trabajo al tipo de proyecto concreto que vayas a desarrollar en ese momento. Son flexibles, productivas y eficaces, algo que es imposible conseguir hoy en día con métodos más convencionales.
Si aplicas las metodologías ágiles en tu empresa podrás obtener los siguientes beneficios inmediatos:
- Rentabilidad: Gracias a ellas conseguirás evitar el uso innecesario de recursos, ya que emplearás el número de personas adecuado para cada proyecto. Además, también conseguirás reducir los tiempos de entrega.
- Flexibilidad: Los cambios se integran con mayor facilidad. Al tratarse de metodologías que se adaptan con sencillez a las circunstancias cambiantes, puedes dividir el trabajo y mantener un control específico de cada una de las tareas.
- Compromiso: Consiguen que la motivación de los miembros de cada equipo aumente considerablemente. Participan y aportan ideas debido a que el entorno puede cambiar de un momento a otro, algo que no sucede en los métodos más tradicionales, en los que solo manda una persona.
- Producto final: El servicio o producto que le acaba llegando a tus clientes es el que ellos buscan. Ten en cuenta que el propio cliente está involucrado en este proceso, porque para aplicar estas metodologías es necesario tenerlos en cuenta en todo momento.
VUCA y BANI son dos conceptos que explican una realidad cambiante a lo largo de los años. Al fin y al cabo, lo que nos indican es que las organizaciones deben adaptarse a los cambios rápidamente. Una manera ideal de hacerlo es aplicando las metodologías ágiles. Si quieres saber más sobre este tema, contacta con Agilewow4all.
